martes, 2 de diciembre de 2008

PROHIBIDO UTILIZAR CELULAR


TELÉFONOS CELULARES

El uso frecuente del teléfono celular puede ser nefasto para la salud. Según el Instituto del Cáncer en la Universidad de Pittsburgh (EEUU), la radiación electromagnética puede provocar cáncer.El teléfono móvil se ha convertido en un elemento imprescindible en la actualidad. Aunque durante los seis primeros meses del año, las ventas de móviles han bajado en España un 10%, estos aparatos siguen teniendo tirón en el mercado de las comunicaciones. Sin embargo, sus prestaciones, pueden a la larga tener un efecto nocivo para la salud. Así lo ha advertido hoy Ronald Herberman, director del Instituto del Cáncer en la Universidad de Pittsburgh.Basándose en "el asesoramiento de un panel internacional de expertos" que incluye a científicos de Francia, Italia y Holanda, Haberman ha dado la voz de alarma. "Los campos electromagnéticos generados por los teléfonos celulares deben considerarse un peligro potencial para la salud humana", ha asegurado.Según este especialista en la prevención y el estudio del cáncer aún no hay datos concluyentes sobre los efectos biológicos de los teléfonos celulares e inalámbricos. Sin embargo, "un conjunto creciente de pruebas indica que deberíamos reducir la exposición mientras continúa la investigación de este asunto".El riesgo de los teléfonos móviles reside, al parecer, en la radiación electromagnética que emiten estos aparatos y de la que advierten también los fabricantes de los mismos. Los campos electromagnéticos generados, puede ser, según Herberman, que no afecten de la misma forma a todas las personas, y que "penetren más profundamente en el cerebro de los niños".

MIREN AQUÍ UN VIDEO SOBRE LAS RADIACIONES QUE EMITE EL CELULAR:


RECOMENDACIONES:
Aunque no existen pruebas definitivas -pero sí indicios sobre los efectos de los móviles en la salud-, este experto de la Universidad de Pittsburg ha lanzado una serie de recomendaciones. La primera de ellas, es prohibir el uso de móviles en niños. Al mismo tiempo, Herberman ha recomendado a todos los usuarios de móviles que usen el teléfono lo más lejos posible del cuerpo. Según ha asegurado con esta medida, "la radiación se reduce un 75 por ciento a una distancia de cinco centímetros y es cincuenta veces más baja a 90 centímetros".El Dr. Ronald Herberman, director del Centro de Cáncer de la universidad ha enviado un memorando a sus 3.000 empleados con esta advertencia.Algunos países como Francia, Alemania e India ya han lanzado recomendaciones para limitar la exposición de radiación electromagnética en sus pobladores y que además el Departamento de Salud Pública de la ciudad de Toronto en Canadá, esta aconsejando a los niños y adolescentes a que limiten el uso de teléfonos celulares para evitar futuros riesgos.Las recomendaciones del panel de expertos han sido publicadas en la página web del Centro de Cáncer y Medio Ambiente de la Universidad de Pittsburg. El asunto empieza cuando se entiende que un teléfono celular no podría funcionar si no fuera porque es un aparato que recibe y envía ondas electromagnéticas a través de su antena. Estas ondas electromagnéticas, de acuerdo a muchos expertos deben considerarse como elementos contaminantes, potencialmente peligrosos para la salud. Quizás una analogía interesante sería compararla con el humo del cigarrillo, que ahora bien sabemos, no solo afecta al usuario del cigarrillo, sino a todas las personas que respiran el aire contaminado con el humo.El problema se produce cuando se entiende que para poder escuchar la conversación, el teléfono celular debe ser colocado en el oído, pegado a la cabeza, separado del cerebro solo por el cuero cabelludo y el hueso del cráneo.En los niños, las radiaciones electromagnéticas penetran más por el menor tamaño del cerebro y por tener tejidos más blandos.

¿Qué efecto tienen estas ondas electromagnéticas en el funcionamiento y en la estructura de nuestro cerebro?Pues esa es la gran pregunta, la que según el Dr. Heberman y otros expertos no tiene todavía una respuesta definitiva; pero que según el panel de expertos internacionales que motivó al Dr. Heberman a escribir su memorando, ya tiene una respuesta que apunta en una dirección no muy favorable para la salud de los usuarios de teléfonos celulares.
Desde que comenzaron a operar los teléfonos celulares, muchas personas expresaron su preocupación ante la forma en que podían afectar la salud humana. La convivencia con un aparato que emite continuamente radiaciones inquietó a las asociaciones de usuarios y consumidores de todo el mundo. Como el teléfono se apoya en la cabeza para hablar, el centro de las preocupaciones fue el eventual riesgo de cáncer cerebral. También se mencionó el riesgo de cáncer sobre otros órganos, debido a que el aparato se suele llevar encendido (es decir, emitiendo y recibiendo) en una funda que se apoya sobre el cuerpo.La respuesta de las empresas fue que se trataba de una fantasía y que el riesgo no existía. Lo mismo dijeron varios estudios epidemiológicos firmados por entidades científicas muy respetables. El
teléfono celular posee en su interior un transmisor que emite radiación muy cerca de la cabeza. Esto desde su invención, ha causado gran preocupación entre la población, ya que no se sabía si esta radiación del celular podía causar cáncer del cerebro o de otros órganos del sistema nervioso central. En realidad, se hacen estudios con referencia a este tema desde el año 1994.Aquellos primeros estudios incluyeron 800 pacientes con este tipo de tumor provenientes de instituciones de las ciudades estadounidenses de Phoenix, Boston y Pittsburg y 800 casos de control. La recolección de datos consistió en una exhaustiva encuesta personalizada, con preguntas muy específicas sobre la fecha de comienzo de uso del teléfono celular, cuánto tiempo lo utilizaba, fecha última y nivel de utilización. No se registró información acerca del modelo de aparato. Los datos terminaron de recogerse en 1998.Los investigadores no encontraron evidencia de que el riesgo de una persona de desarrollar un tumor cerebral aumentara con la cantidad de años o minutos promedio de uso diario del teléfono celular. Tampoco los tumores cerebrales tendieron a ocurrir más seguido de lo esperado del lado de la cabeza en el que reportaron utilizar el teléfono. Entre los que más lo utilizaban, el promedio fue de aproximadamente 15 minutos por día ó más por al menos tres años. Muy pocas personas utilizaron este tipo de aparatos frecuentemente por más de cinco años.Peter Inskip, Sc.D., quien fue el investigador principal, sostuvo que no hallaron evidencia de que el uso de celulares causaran tumor cerebral, sin embargo, aclaró, si el mayor riesgo ocurriera después de más de cinco años de uso o en personas con alta intensidad de utilización, este estudio probablemente no lo detectaría.La investigación se realizó entre los años 1994 y 1998, período en el cual eran más frecuentemente utilizados los teléfonos analógicos. Actualmente predominan los digitales, que operan a una frecuencia mayor. Sin embargo, no existe evidencia hasta el momento de que el riesgo de cáncer difiera entre estos dos tipos de teléfono.Resultados similares fueron encontrados en otros dos estudios, uno publicado en diciembre de 2000, en el Journal of the American Medical Association by Muscat et al, que incluyó 469 casos de tumor cerebral y 422 controles y otro estudio efectuado en Suecia por by Hardell et al que incluyó 233 casos y 466 controles. Ninguno de estas dos investigaciones encontró asociación. Sólo se reportó alguna relación entre el lado de la cabeza que se utilizaba para hablar por teléfono y la ubicación del tumor, pero esta asociación se basó en muy pocos casos.Hoy en día, existen además tres tipos de teléfonos inalámbricos o móviles que se utilizan: teléfonos celulares para automóviles, celulares transportables y teléfonos inalámbricos. Todos estos implican una menor exposición del cerebro a la radiación ya que la unidad que la emite se encuentra a cierta distancia de la persona. Si los teléfonos celulares muy pequeños que se transportan en la mano no presentan mayor riesgo de tumor cerebral, sería muy sorprendente que estos otros tipos de teléfonos sí lo causaran, ya que exponen a una frecuencia de radiación mucho menor.El número de usuarios de teléfonos celulares ha aumentado enormemente en los últimos 10 años y las tendencias continúan así. Debido a esto, gran cantidad de investigaciones científicas que estudian la relación entre utilización de celulares y tumor cerebral, se están llevando a cabo actualmente. El más grande, es un estudio multicéntrico internacional que comprende 3000 casos y 3000 controles, coordinado por la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC), cuya sede se encuentra en Lyon, Francia. Restan varios años todavía para la obtención de resultados. Por otra parte, se espera que los resultados de otra investigación realizada en Dinamarca que incluyó 550.000 usuarios de teléfonos celulares desde 1982 a 1995, sean publicados. Actualmente en Estados Unidos y en el Reino Unido, se están destinando fondos y esfuerzos para continuar con el desarrollo de investigaciones sobre este tema.Las causas de tumor cerebral son desconocidas, por ello, los científicos del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, evalúan un amplio rango de posibles factores de riesgo que incluyen a los ambientales, los relacionados con el estilo de vida y los genéticos. Estos incluyen exposición en el trabajo a agentes químicos y campos electromagnéticos, factores dietéticos, historia familiar de tumores, factores genéticos, utilización hogareña de algunos artefactos, historia reproductiva y exposición hormonal, virus, y exposición tanto médica como dental a la radiación iónica. Los resultados de estos reportes aparecerán en publicaciones futuras y debido al interés de la población, el uso de los teléfonos celulares será el primero.
Pareciera que en estos días todo el mundo tiene un teléfono celular. Los teléfonos celulares en realidad no son teléfonos. Son radios en dos sentidos. Un teléfono celular cambia su voz en ondas de radio.Muchos de los objetos que utilizamos a diario se basan en ondas de radio. Los radios, los televisores, los buscapersonas ("pager", "beeper") y los teléfonos inalámbricos, todos utilizan ondas de radio.Otro término para las ondas de radio es "energía de radio frecuencia" (abreviado como "RF"). Grandes cantidades de RF son dañinas para los seres humanos. Los teléfonos celulares utilizan apenas una cantidad pequeña de RF. Pero, algunas personas piensan que aun una cantidad pequeña de RF puede ser perjudicial.

¿Cómo pueden cantidades grandes de RF hacer daño a la gente?Las cantidades grandes de RF pueden calentar los tejidos del cuerpo. El tejido que se calienta puede sobrecalentar otras partes del cuerpo. Los ojos y los testículos tienen las mayores probabilidades de sobrecalentarse con la RF. Eso sucede porque a esas zonas del cuerpo llega poca sangre. La sangre puede llevarse cantidades grandes de calor.La cantidad de RF de los teléfonos celulares, los aparatos de radio y los televisores es muy baja para calentar los tejidos del cuerpo. Sin embargo, algunas personas tienen dudas acerca de si los niveles bajos de RF pueden causar daño a las personas. Hacen falta más estudios para determinar cuáles son los verdaderos efectos y si pueden o no perjudicar a las personas.

¿Cuánta RF utilizan los teléfonos celulares?Los teléfonos celulares emiten niveles bajos de RF cuando se están en uso. Los niveles de RF son muy bajos cuando están en un período de autonomía en espera ("stand-by").

¿Pueden los teléfonos celulares ser un peligro para la salud?Hasta ahora, la ciencia no ha demostrado que los teléfonos celulares causen algún problema de salud. Pero, es necesario hacer más estudios.

¿Cuál es la función de la FDA en cuanto a la seguridad de los teléfonos celulares? La FDA no examina los teléfonos celulares antes de su venta. La FDA solamente examina los medicamentos y los dispositivos médicos nuevos. Pero, la FDA está autorizada para actuar si se demuestra que los teléfonos celulares pueden causar problemas de salud. La FDA puede exigir a los fabricantes de los teléfonos celulares que le adviertan al público sobre los peligros. Esto tal vez exija a los fabricantes reparar, reemplazar o retirar del mercado los teléfonos.

¿Cuál es la opinión de la FDA acerca de la seguridad de la RF de los teléfonos celulares?La FDA cree que:Es necesario hacer más estudios sobre la RF. Otros estudios podrían ayudar a demostrar si la RF tiene efectos perjudiciales para la salud.Los teléfonos celulares deberían exponer a la gente a la menor cantidad posible de RF.La gente que utiliza los teléfonos celulares debe saber si tienen efectos perjudiciales. La FDA debería presentar los hechos a los usuarios.

¿Qué está haciendo la FDA acerca de la RF de los teléfonos celulares?La FDA quiere investigar más acerca de la RF de los teléfonos celulares. Está trabajando con otros grupos que se ocupan de la salud para hacer más estudios sobre la RF. La RF de los teléfonos celulares puede cambiar la forma en que funcionan ciertos dispositivos médicos. Los marcapasos y los aparatos para la audición pueden verse afectados. Ya hay normas de la FDA para esos dispositivos.

¿Son peligrosos los teléfonos celulares para los niños y los adolescentes?Hasta ahora, los estudios no han demostrado ningún efecto perjudicial para nadie de la RF de los teléfonos celulares.

Estoy preocupado por la RF de los teléfonos celulares. ¿Cómo puedo reducir cualquier riesgo posible?Una vez más, las investigaciones no han demostrado efectos perjudiciales de la RF de los teléfonos celulares. Pero si todavía está preocupada puede:Utilizar su teléfono celular menos seguido.Mantener el teléfono celular más alejado de su cuerpo. Puede usar un soporte que le permita tener las manos libres. Emplear un protector para la cabeza cuando utilice el teléfono celular.


"GRACIAS... Gueddy"